El blog de Aragón Mudéjar entra otra vez de lleno en el mundillo gastronómico. Si en su día escribí sobre los melocotones de Calanda, hoy es el momento de otro fruto realmente exquisito: las cerezas de Bolea.
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Bolea es un pequeño municipio aragonés situado en la Comarca de la Hoya de Huesca. Se encuentra a 20 kilómetros al norte de la ciudad de Huesca, justo en las faldas de las sierras de Caballera y Gratal. Además de su vertiente alimenticia, particularizada en las cerezas, destaco, como siempre, otros atractivos incluidos dentro del acervo cultural y patrimonial. En este caso no puedo dejar de mencionar la Colegiata de Bolea o el monasterio de la Santísima Trinidad.
Pasado y presente de las cerezas de Bolea
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Las cerezas de Bolea son el paradigma de empresa familiar que, gracias al trabajo bien hecho, ha ido pasando de una mano a otra en el árbol genealógico y mantiene, e incluso mejora, su calidad. Cerezas de Bolea S. C., es el nombre de la sociedad que, desde hace 40 años, cultiva este exquisito fruto.
Cerezas de un diámetro superior a los 30 milímetros, en cuyo cultivo se utilizan fertilizantes orgánicos y riego por goteo. Tratando siempre de mantener el máximo respeto posible por el medio ambiente. Hasta once variedades de cerezas son las producidas: Prime Giant, Summit, Lapins, Starking, 3.13, Satin, Skeena, Katalin, Sweet Heart, Rainier y Picota. Un amplio escaparate en el que elegir la cereza que más se ajuste a tus gustos: muy carnosa, poco carnosa, muy productiva, poco productiva, hueso pequeño, hueso grande, dulce, ácida, muy carnosa, poco carnosa…
La Feria de la Cereza de Bolea
La fama de las cerezas de Bolea ha alcanzado un punto tal que su lugar de nacimiento, la villa de Bolea, organiza desde el 2009 la Feria de la Cereza de Bolea. El pasado mes de junio tuvo lugar la quinta edición (en 2013 no se llevó a cabo).
Integrante desde hace dos años del listado oficial de ferias de Aragón, durante un día las exquisitas cerezas toman la plaza Mayor de esta bonita localidad oscense. Miles de estos pequeños frutos rojizos se venden. Es el día de la cereza y una cita ineludible para todos los productores.
Además de, por supuesto, para ser comidas directamente, las cerezas de Bolea son también un ingrediente espectacular para la generación de mermeladas o bombones. ¿Te apetece una cereza?
